Aunque se conoce comúnmente como empaste, su nombre técnico es obturación dental o reconstrucción y es uno de nuestros grandes aliados a la hora de tratar una caries o restaurar una fractura dental, ya que nos permite rellenar la cavidad y restablecer la función del diente.
En Bucalia vamos a hablarte de qué tipos de empastes dentales hay y qué materiales podemos encontrar en cada uno.
Empastes de Amalgama
Son los clásicos empastes plateados que hemos visto tantas veces y que actualmente apenas se utilizan, pero que fueron muy populares en el pasado. Estos empastes estaban compuestos de una mezcla de mercurio, plata, estaño y cobre, y fueron objeto de debate debido precisamente a su contenido de mercurio.
Su popularidad se debía principalmente a dos de sus ventajas: su alta durabilidad y su coste. Eran resistentes ante la masticación y el desgaste diario y además eran muy asequibles económicamente.
*Actualmente están prohibidos en algunas zonas.
Empastes de Composite
Este tipo de empaste se conoce también como empaste de resina, y su ventaja reside en su pigmentación: es muy similar al color natural de nuestros dientes. El material de estos empastes es un híbrido que suele estar formado de partículas de vidrio.
Otra de sus ventajas es que para su colocación no es necesario eliminar mucho tejido dental sano, por lo que es una opción muy poco invasiva.
Empastes de Porcelana
Dentro de los tipos de empastes dentales esta es una de las opciones más duraderas y estéticas. Estos empastes suelen tener una vida útil más larga que la del composite y además se fabrican con cerámica de alta calidad por lo que el color imita al del diente con bastante precisión, siendo además muy resistentes a las manchas.
Aprovechamos para recordarte que tenemos un artículo sobre las causas de la caries.
Empastes de Ionómero de Vidrio
Esta obturación dental se caracteriza por su capacidad para prevenir la formación de caries gracias a que va liberando flúor. El material que lo compone es un compuesto de polvo de vidrio y ácido poliacrílico, que se adhiere a nuestros dientes mediante un proceso de endurecimiento químico. El empaste de ionómero de vidrio es menos duradero que otros tipos de obturaciones, pero son especialmente adecuados para restauraciones temporales o áreas con menos presión de masticación.
Empastes de Oro
Es una de las opciones más caras y como sucede con la amalgama, también es muy duradera, pudiendo resistir décadas. Este empaste destaca especialmente entre el conjunto de dientes, por lo que debes tener en cuenta que estéticamente va a ser muy llamativo. Por otro lado, el oro es un material que se adapta muy bien al contacto con la piel, por lo que pese a su precio sigue siendo un empaste relativamente popular.
Estos son los principales tipos de empastes dentales y los materiales que se utilizan en cada uno de ellos. Si te quedan más dudas sobre este tema o quieres que nuestros profesionales te ayuden personalmente, recuerda que puedes contactar con nosotros y reservar tu cita aquí.
